Fede
Comentado en España el 29 de abril de 2024
Diseñada para actividades muy concretas, resulta que esta cámara, de OM System, antigua Olympus, sirve para muchas más cosas que actividades en la naturaleza, submarinismo o apoyo en trabajos de construcción. Y es que su estanqueidad, su resistencia y su diseño, de tamaño comedido pero que sienta bien a dedos grandes como los de un servidor, también la hacen buena para fotografía de calle o del día a día, quiero decir que es una cámara para llevarla encima siempre, o casi siempre, y es lo que hago. El hecho de que el objetivo no se extienda al encenderla o al enfocar es una gran ventaja para poder llevarla a todas partes en el bolsillo (cabe perfectamente en uno de camisa o de pantalón) sin que tengamos temor a que la extensión del objetivo pueda resultar en daños al mismo o en retrasos a la hora de tirar la foto.Como queda muy claro en sus características sobre el papel, no voy a citar sus muchas cualidades de cámara, vamos a decir, blindada, y menos la de sumergirla hasta quince metros, cosa que no he hecho ni voy a hacer puesto que no soy submarinista. Doy fe de que en lo demás se comporta exactamente como dicen. La he puesto bajo el grifo, eso sí, porque tenía curiosidad con el tema del agua, y salió bien. Ojo, que no se trata de sumergirla sin más y cuando acabemos guardarla y ya está: las instrucciones son muy claras, en menos de una hora desde el momento en que la hayamos sacado del agua es muy conveniente secarla bien con un paño siguiendo las instrucciones del manual, ya que esto nos ayudará a que la cámara dure y funcione correctamente. Tampoco la he dejado caer para comprobar que sea resistente a los golpes; esto lo vamos a dejar en un interrogante y, si tenemos mala suerte, ya veremos lo que pasa.La calidad de imagen, ¡ay la calidad de imagen! ¿Qué podemos esperar de un sensor pequeño, de 1/2.33"? Pues eso. Y, sin embargo, muchas fotos, en líneas generales, salen bien. Con buena luz, con ISO reducida, etc., la calidad de los jpeg que entrega es aceptable. Por mi parte, siempre tiro en doble formato, con algún filtro creativo para el jpeg de los muchos que trae y que son muy entretenidos, y en formato raw, para poder procesarlo luego con algún programa de revelado digital si el resultado del jpeg no me satisface. Proceso los archivos .orf, los raw que entrega esta máquina, con programas de revelado actualizados, unas veces con Lightroom, otras con Camera Raw en Photoshop, y, en otras ocasiones, y va muy bien para eliminar el ruido, con DxOPureRAW3, con plena satisfacción, y lo cierto es que en muchos casos la mejora con respecto a los jpeg es extraordinaria. Hasta el momento, con este sistema estoy contento. Es, pues, una más que aceptable segunda, o tercera, cámara, para quienes tenemos la fotografía como hobby máximo.La TG-7 es casi automática. Y digo casi porque, primero, no tiene modo M (manual completo) en el selector, ni tampoco modo S (prioridad a la velocidad); pero, segundo, sí que tiene modo A (prioridad a la apertura), aunque sea más el ruido que las nueces, porque las aperturas, dependiendo de la distancia focal, pueden elegirse de entre una escala muy pequeña (por ejemplo, en 25mm, que es el mayor angular, las posibilidades son tres: f/2, f/2.2 y f/8, no hay más opciones), cosa que hace que este modo, el único realmente no automático, sea muy poco práctico. El mejor modo, desde mi punto de vista, es el P (automático programado), pues con él seleccionado podemos actuar sobre la compensación de la exposición con la rueda superior, y la cámara selecciona de forma automática la velocidad y la apertura. Para foto de calle o instantáneas al uso, familiares y demás, creo que es una opción bastante buena. El modo AUTO (automático) puede ser una opción si no andamos muy finos en ese momento o no nos apetece andar cambiando la compensación de la exposición. Por otra parte, todo ello se compensa mediante las posibilidades que dan los modos SCN (escena), en el que podemos elegir entre muchas y muy buenas opciones, y MACRO (que tiene, a su vez, cuatro opciones de disparo muy bien traídas). Y hay que decir que el macro, con buena luz, es espectacular. En el dial de modos, hay dos opciones, C1 y C2, que nos permiten guardar, en cada uno, los parámetros de disparo que prefiramos, otra muy buena posibilidad de uso. Ahí tengo, en uno, un blanco y negro retro, y en el otro una posterización con colores muy vivos, por ejemplo. El modo vídeo también es configurable y los resultados son bastante correctos. No he comprado esta cámara para hacer vídeo, pero se agradece tener la posibilidad y que la calidad sea 4K. Eso sí, el ruido del zoom hace que o bien no lo podamos usar o que tengamos que sonorizar en posproducción.Y resumo diciendo que a pesar de ser una máquina bastante cara para lo que es desde el punto de vista fotográfico, sí que es interesante, no solo por sus muchas posibilidades como cámara del día a día o para fotos de calle, sino también por sus muchas cualidades de uso, más o menos prácticas, y no fotográficas, como su blindaje a agua y golpes, su posibilidad de uso con temperaturas no habituales, el hecho de que lleve GPS, altímetro, termómetro, etc. Y termino haciendo referencia a algo que no me ha gustado mucho, y es que, pese al elevado precio de la cámara, no trae adaptador a red eléctrica ni cargador. La batería puede cargarse dentro de la cámara, pero al no incluir un adaptador, nos veremos obligados a utilizar uno de un móvil o, si coincide en especificaciones técnicas, de otra cámara. En la caja solo vienen, con la cámara, la batería, el cable USB-C (que hay que usar siempre, sí o sí, de acuerdo con el manual, so pena de tener un disgusto), una pequeña correa de mano y el manual de inicio en papel, en tropecientos idiomas, entre ellos el castellano.